ESTERILIDAD

La infertilidad se considera cuando las parejas no pueden concebir después de al menos un año de relaciones sexuales o cuando no es posible volver a concebir después de haberse quedado embarazados al menos una vez.

Existen varios factores que causan infertilidad en la mujer como problemas físicos, hormonales, por el estilo de vida o ambientales. Podemos destacar entre los factores más comunes principalmente a:

  • Edad avanzada: existe una correlación entre la edad avanzada y la capacidad reproductiva. A partir de los 35 años, esta capacidad disminuye progresivamente. Una vez alcanzados los 40, la posibilidad del embarazo es muy baja.
  • Factor tubo-peritoneal. Se debe a una lesión en las trompas de Falopio.
  • Endometriosis: Cuando el tejido uterino se encuentra fuera del útero.
  • Otros factores de riesgo: como enfermedades de trasmisión sexual, enfermedades crónicas o toma de medicaciones.
  • Problemas de ovulación, como el síndrome de ovario poliquístico. Esta afección consiste en que los ovarios son incapaces de liberar un óvulo con regularidad o no pueden liberar un óvulo sano.
  • En Clínica Zahrawi tenemos como solución la estimulación ovárica y la inseminación artificial.


    Estimulación ovárica

    La estimulación ovárica es un proceso que consiste en inducir una ovulación múltiple mediante mediaciones hormonales. Esta técnica modifica el ciclo menstrual y ello permite el control del inicio del ciclo por parte del especialista, y que se desarrolle el folículo ovárico. El objetivo es obtener un mayor número de óvulos y de mejor calidad. De esta manera, al aplicar el tratamiento de fertilidad se incrementan las probabilidades de embarazo.

    Existen diferentes grados de estimulación, desde las más fuertes hasta las más suaves. Este proceso suele durar entre 8 y 14 días. El proceso de introducir hormonas que estimulen los ovarios suele empezar el segundo o tercer día de menstruación.


    Inseminación artificial

    La inseminación artificial consiste en colocar en el útero los espermatozoides seleccionados de una muestra de semen, con la finalidad de incrementar el número de espermatozoides y las posibilidades de fecundación del óvulo. De este modo, lo que se consigue acortar la distancia que separa los espermatozoides del óvulo.

    El origen del semen donado puede ser de la pareja o de un donante. La idoneidad de cada uno depende de la capacidad de fecundación de cada miembro de la pareja.

    El semen del donante es idóneo para:

  • Varones con mala calidad o ausencia de espermatozoides.
  • Varones portadores de una enfermedad genética
  • Casos de mujeres sin pareja masculina
  • El semen de la pareja es idóneo para:

  • Parejas con esterilidad de origen desconocido
  • Parejas en las que la mujer tiene problemas de ovulación
  • En casos de alteración a nivel del cuello uterino.
  • Parejas en las que el varón presenta defectos leves o moderados en el semen.